Asesinan a hijo de policía
Criminales encabezados por una mujer le roban camioneta y lo acribillan aparentemente por resistirse al asalto
A pocos metros del Escuadrón de Emergencia Este 1, cinco delincuentes liderados por una mujer asesinaron de dos balazos al hijo de un policía porque se opuso al robo de su camioneta en la cuadra 4 de la avenida Los Duraznos en el distrito de San Juan de Lurigancho.
Todos los planes de Angelo Palomino Sánchez, un muchacho de apenas 21 años que estudiaba dos carreras profesionales, administración de empresas y publicidad, se vino abajo el pasado martes.
El universitario, hijo del suboficial PNP Jesús Palomino, iba a bordo de su camioneta de placa PQM-969 y a las 7:30 de la mañana llegó a la mencionada dirección donde funciona una empresa dedicada a la instalación de gas natural para recoger a una ingeniera.
Según testigos, el estudiante, quien desde hace dos meses prestaba servicios a esa compañía, se estacionó en el frontis del local y a los pocos segundos cinco delincuentes, entre ellos una mujer, descendieron de un automóvil y lo encañonaron.
Los hampones le golpearon la cabeza con la cacha del arma, pero al parecer, Angelo, quien trabajaba para pagar sus estudios, se opuso al robo, por lo que uno de los hampones le disparó en el abdomen y el cuello sin compasión.
Luego los asaltantes bajaron del vehículo a su víctima. La líder de la banda se fue manejando la camioneta y sus cómplices se subieron en los asientos de la parte posterior, relató un testigo. Aún con vida, el universitario fue trasladado de emergencia a la clínica San Gabriel, pero los médicos nada pudieron hacer para salvarle la vida, pues los proyectiles habían afectado órganos vitales.
Hasta el lugar llegaron familiares del muchacho, quienes al enterarse de su temprana partida lloraron desconsolados.
Susi Sánchez Jara, madre del infortunado, contó entre lágrimas que en los últimos días notó a su hijo nervioso y le dijo una frase que lo dejó desconcertada. 'Llegó almorzar y me dijo mamita, estoy pedido', recordó doña Susi.
Sostuvo que le preguntó preocupada a su hijo por qué decía eso y él le respondió que no se preocupara, que todo iba a estar bien.
Pidió además a los agentes encargados de las pesquisas que investiguen a fondo y den con los responsables de la muerte de su hijo. Tampoco descarta que unos colombianos a quienes su hijo conoció en el trabajo estén tras el crimen. 'De repente lo estaban amenazando, mi Angelo estaba muy extraño en estos días, se le notaba preocupado. Salía a la puerta de casa y luego entraba', sostuvo.
Precisó que su esposo hace un año compró la camioneta y la puso a nombre de su hijo para que trabaje y se pague sus dos carreras profesionales. Recordó que la mañana del martes, antes de que Angelo saliera a trabajar, le dio un fuerte abrazo, le dijo que lo quería mucho y que solo pensaba trabajar hasta este domingo para la empresa. 'Mi papá viene de Cajamarca el domingo y vendo el carro, ya no quiero estar allí', le dijo.
Con el rostro desencajado, la mujer pidió que capturen a los responsables de la muerte de su hijo, quien en sus ratos libres gustaba de tocar la guitarra.
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Todos los planes de Angelo Palomino Sánchez, un muchacho de apenas 21 años que estudiaba dos carreras profesionales, administración de empresas y publicidad, se vino abajo el pasado martes.
El universitario, hijo del suboficial PNP Jesús Palomino, iba a bordo de su camioneta de placa PQM-969 y a las 7:30 de la mañana llegó a la mencionada dirección donde funciona una empresa dedicada a la instalación de gas natural para recoger a una ingeniera.
Según testigos, el estudiante, quien desde hace dos meses prestaba servicios a esa compañía, se estacionó en el frontis del local y a los pocos segundos cinco delincuentes, entre ellos una mujer, descendieron de un automóvil y lo encañonaron.
Los hampones le golpearon la cabeza con la cacha del arma, pero al parecer, Angelo, quien trabajaba para pagar sus estudios, se opuso al robo, por lo que uno de los hampones le disparó en el abdomen y el cuello sin compasión.
Luego los asaltantes bajaron del vehículo a su víctima. La líder de la banda se fue manejando la camioneta y sus cómplices se subieron en los asientos de la parte posterior, relató un testigo. Aún con vida, el universitario fue trasladado de emergencia a la clínica San Gabriel, pero los médicos nada pudieron hacer para salvarle la vida, pues los proyectiles habían afectado órganos vitales.
Hasta el lugar llegaron familiares del muchacho, quienes al enterarse de su temprana partida lloraron desconsolados.
Susi Sánchez Jara, madre del infortunado, contó entre lágrimas que en los últimos días notó a su hijo nervioso y le dijo una frase que lo dejó desconcertada. 'Llegó almorzar y me dijo mamita, estoy pedido', recordó doña Susi.
Sostuvo que le preguntó preocupada a su hijo por qué decía eso y él le respondió que no se preocupara, que todo iba a estar bien.
Pidió además a los agentes encargados de las pesquisas que investiguen a fondo y den con los responsables de la muerte de su hijo. Tampoco descarta que unos colombianos a quienes su hijo conoció en el trabajo estén tras el crimen. 'De repente lo estaban amenazando, mi Angelo estaba muy extraño en estos días, se le notaba preocupado. Salía a la puerta de casa y luego entraba', sostuvo.
Precisó que su esposo hace un año compró la camioneta y la puso a nombre de su hijo para que trabaje y se pague sus dos carreras profesionales. Recordó que la mañana del martes, antes de que Angelo saliera a trabajar, le dio un fuerte abrazo, le dijo que lo quería mucho y que solo pensaba trabajar hasta este domingo para la empresa. 'Mi papá viene de Cajamarca el domingo y vendo el carro, ya no quiero estar allí', le dijo.
Con el rostro desencajado, la mujer pidió que capturen a los responsables de la muerte de su hijo, quien en sus ratos libres gustaba de tocar la guitarra.
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